8.12.2009

Insípidamente real.


Me siento distinta, ¿Insípida? ¡Sí! Insípida, hace muchos varios meses, o años, quizás, que no me sentía así. Creo que cuelgo de cabeza en una nube, que no tengo ninguna función específica, y me hace sentir absurda; me gustaría, me desarmaría sólo por saber el porqué de mí. O quizás eso creo, y realmente no me interesa, aunque no creo que sea tan así. Me contradigo, maldigo, me relajo y me acelero, ya no tengo cabeza, aunque la veo en mí, por encima de mi cuello. Siento en mí, algo extraño, algo nuevo que me hace volcar mis pensamientos hacia un lugar desconocido, inexplorado. Quiero volar, volar lejos. Pero al no poder alzar el vuelo, me vuelvo, y descubro que me encuentro atada, atada a una gran roca que no me permite cumplir mi sueño de volar, volar y alejarme de este lugar, para poder encontrar un fin, o más que un fin.. Una respuesta.

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